"Las industrias culturales tienen una importancia plena en la gestión pública de los países de América del Sur y aportan en promedio entre el 2 y 4 por ciento del PBI, pero quedan pendientes tareas de integración. Tenemos una agenda muy vasta para intercambiar, discutir y hallar soluciones para que el tránsito de los bienes culturales en el continente sea más fluido y rápido", dijo Hamawi en el marco del MICA, que se desarrolla hasta el domingo en el predio de Tecnópolis.
"Nuestra región -agregó el funcionario- en términos de exportación tiene saldo negativo e importamos con países fuera de la región. Debemos revertir la falta de conocimiento de nuestros creadores e instalar instrumentos para acordar un mayor estímulo a la distribución de estos bienes culturales", sostuvo sobre la concreción de este mercado regional de industrias de la cultura.
Hamawi celebró este compromiso con los países que conforman la UNASUR porque "es una ocasión única de nuestro continente y están dadas las condiciones para que los funcionarios de áreas de cultura demos el puntapié inicial".
De esta forma, productores y emprendedores culturales de Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Chile, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Uruguay, Venezuela y Surinam se encontrarán el próximo año para "romper asimetrías", en palabras de Hamawi, y realizar un gran mercado que establezca un "bloque cultural más fuerte y de mayor volumen".
Entre los invitados estuvo Angel Moreno, coordinador del Grupo Emprendimiento Cultural de Colombia, quien sostuvo que este MICSUR "es un reconocimiento de lo que somos y del potencial de América Latina en la cultura, que es bien necesario mostrar en nuestra región".
"Desde el Estado se abre la posibilidad de abrir nuevos mercados, otros circuitos de distribución. No puede ser que no veamos cine peruano y MICSUR es una plataforma que necesitamos para hacer circular las producciones", añadió Moreno, quien destacó como "muy potente" el sector de la música en su país "más allá de nuestras Shakiras, Carlos Vives o Juanes, hay músicos emergentes, modernos que fusionan con saberes tradicionales".
Luciana Lima, de la secretaría de Economía Creativa de Brasil, destacó que "las expectativas son las mejores posibles. Es una instancia para reconocernos como socios de posibles mercados".
La brasileña también instó a discutir colectivamente los marcos regulatorios. "La venta de una obra de arte en Brasil tiene 100 por ciento de carga tributaria, es un impedimento para conseguir exportar en la región, es necesario derribar las barreras entre nosotros y pensar proyectos culturales a mediano y largo plazo", ejemplificó.
El director de Industrias Culturales de Perú, Pierre Emile Vandoorne, expresó que en su país la producción cultural "requiere algún tipo de validación internacional antes de ser reconocida hacia el interior. Más allá de la integración regional, el MICSUR es una manera de reconocernos a nosotros mismos".
Por su parte, Daniela Fuentes, de la subsecretaría de Industria y Emprendimientos Culturales de Ecuador, contó que en su país, por ejemplo, "el cine y el sector audiovisual han cobrado mucha fuerza. En el último año nuestras películas han ganado 300 premios internacionales, uno cada dos semanas en promedio".
Por eso, para ella, la realización del MICSUR significa "consolidar un mercado a nivel latinoamericano para conocernos y reconocernos y para intercambiar experiencias y comercializar. A nuestros países nos falta acercarnos mucho más, hemos tenido la vista puesta hacia fuera y es hora de reconocernos dentro".
"Nuestra región -agregó el funcionario- en términos de exportación tiene saldo negativo e importamos con países fuera de la región. Debemos revertir la falta de conocimiento de nuestros creadores e instalar instrumentos para acordar un mayor estímulo a la distribución de estos bienes culturales", sostuvo sobre la concreción de este mercado regional de industrias de la cultura.
Hamawi celebró este compromiso con los países que conforman la UNASUR porque "es una ocasión única de nuestro continente y están dadas las condiciones para que los funcionarios de áreas de cultura demos el puntapié inicial".
De esta forma, productores y emprendedores culturales de Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Chile, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Uruguay, Venezuela y Surinam se encontrarán el próximo año para "romper asimetrías", en palabras de Hamawi, y realizar un gran mercado que establezca un "bloque cultural más fuerte y de mayor volumen".
Entre los invitados estuvo Angel Moreno, coordinador del Grupo Emprendimiento Cultural de Colombia, quien sostuvo que este MICSUR "es un reconocimiento de lo que somos y del potencial de América Latina en la cultura, que es bien necesario mostrar en nuestra región".
"Desde el Estado se abre la posibilidad de abrir nuevos mercados, otros circuitos de distribución. No puede ser que no veamos cine peruano y MICSUR es una plataforma que necesitamos para hacer circular las producciones", añadió Moreno, quien destacó como "muy potente" el sector de la música en su país "más allá de nuestras Shakiras, Carlos Vives o Juanes, hay músicos emergentes, modernos que fusionan con saberes tradicionales".
Luciana Lima, de la secretaría de Economía Creativa de Brasil, destacó que "las expectativas son las mejores posibles. Es una instancia para reconocernos como socios de posibles mercados".
La brasileña también instó a discutir colectivamente los marcos regulatorios. "La venta de una obra de arte en Brasil tiene 100 por ciento de carga tributaria, es un impedimento para conseguir exportar en la región, es necesario derribar las barreras entre nosotros y pensar proyectos culturales a mediano y largo plazo", ejemplificó.
El director de Industrias Culturales de Perú, Pierre Emile Vandoorne, expresó que en su país la producción cultural "requiere algún tipo de validación internacional antes de ser reconocida hacia el interior. Más allá de la integración regional, el MICSUR es una manera de reconocernos a nosotros mismos".
Por su parte, Daniela Fuentes, de la subsecretaría de Industria y Emprendimientos Culturales de Ecuador, contó que en su país, por ejemplo, "el cine y el sector audiovisual han cobrado mucha fuerza. En el último año nuestras películas han ganado 300 premios internacionales, uno cada dos semanas en promedio".
Por eso, para ella, la realización del MICSUR significa "consolidar un mercado a nivel latinoamericano para conocernos y reconocernos y para intercambiar experiencias y comercializar. A nuestros países nos falta acercarnos mucho más, hemos tenido la vista puesta hacia fuera y es hora de reconocernos dentro".
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