En sus ediciones de ayer, los medios hegemónicos reforzaron los cuestionamientos para que el Estado haga valer sus derechos en las empresas sobre las cuales posee un porcentaje accionario a través de la ANSES, enfatizando en especial la “reacción de Techint ante la presión del Gobierno”, mientras siguen señalando la medida como un “ataque a la propiedad privada”.
Los medios dominantes establecieron un nuevo campo de batalla mediático en el marco de la opinión pública: instalar en sus lectores, audiencias, consumidores y ciudadanos en general, que la propiedad privada está en riesgo en la Argentina, tomando como ejemplo el modelo de Hugo Chávez en Venezuela. Lo enfatizó La Nación en un editorial de la semana pasada (14/04/2011) y lo retoma Clarín ayer, con el título “Nuevo avance del Gobierno sobre el sector privado”, donde el diario de Magnetto también enfatiza que el “riesgo” que correría el país sería, además de político, jurídico y económico: “La decisión del Gobierno de ampliar su representación en las empresas de las cuales tiene acciones la ANSES constituye un nuevo avance del oficialismo sobre el sector privado, afecta la seguridad jurídica y agrega un nuevo elemento de incertidumbre a la economía”, remarca. En especial, la defensa del multimedios está centrada en su socio contra el gobierno, la multinacional Techint comandada por Paolo Rocca: “(…) como fue admitido por representantes del Gobierno, la urgencia se debió al propósito de llegar a tiempo para intervenir en la asamblea anual de varias empresas, especialmente en una del Grupo Techint, que es desde hace tiempo objeto de una ofensiva oficial y en cuyo directorio debe remplazarse a un director saliente”. Y para magnificar el temor a la “injerencia estatal” en los lectores y en particular en las empresas y el establishment económico, el diario de Noble recurre a agitar la hipótesis de una intervención sindical moyanista en la medida. En el paroxismo de la tergiversación, el diario de Magnetto planta una motivación falaz al gobierno: “La medida se tomó abruptamente, sin discusión parlamentaria y su objetivo es obtener fondos en el año electoral.”
La Nación decide colocar en tapa la medida de la Comisión Nacional de Valores (CNV) que declaró “irregulares e ineficaces” las resoluciones de la asamblea de accionistas de Siderar, del Grupo Techint, ocurrida el viernes pasado, y enfatiza que “se agrava la crisis entre Techint y la Casa Rosada. El Estado insiste en imponer sus directores; el grupo iría a la Justicia.”
BAE destaca: “Estado y empresas: el fin del socio bobo” y fustiga contra “la falsa dicotomía que pretende enfrentar al sector público con el privado”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario