Para los medios hegemónicos, la deserción de Julio Cobos de la candidatura presidencial de octubre significa otro golpe que los obliga a realizar nuevos intentos por unificar a la oposición. Ante la evidencia de que hasta el momento ninguno de los candidatos opositores está en condiciones de disputar la presidencia con posibilidades de derrotar al oficialismo, Clarín y La Nación, en sus ediciones de ayer, apuestan a una eventual alianza entre la Unión Cívica Radical y el Peronismo Federal. Por este motivo concretan una entrevista al precandidato presidencial de la UCR, Ricardo Alfonsín, amplificando la voluntad del político radical de “sumar a peronistas”, con la intención de acercarse un poco al kirchnerismo en intención de voto.
La agenda compartida y las similitudes discursivas entre los medios de Noble y Mitre se pusieron otra vez en evidencia. Clarín en la página 8 titula con la declaración de Alfonsín: “Tenemos que ampliar las alianzas; se necesitan votos peronistas”. La Nación, en tapa titula: “Alfonsín abre la puerta a un acuerdo con el PJ disidente”, y en la página 8: “Alfonsín busca sumar a peronistas.” Otro recurso discursivo compartido son las fotografías con las cuales los medios dominantes ilustran sus notas. En ambas, Alfonsín luce la misma camisa blanca a cuadros, arremangada, con un ancho bolsillo en el lado izquierdo. En los epígrafes de las fotos, en ambos casos se menciona a su padre, el fallecido ex presidente Raúl Alfonsín, casi como una apelación a su figura. Clarín enfatiza: “Confiado. Ricardo Alfonsín, ayer en la casa de su padre, durante la entrevista con Clarín”. La Nación destaca: “Ricardo Alfonsín, ayer, en la biblioteca que fue de su padre, en el departamento de Santa Fe al 1600.”
Es evidente la operación política de los socios mediáticos para hacer una entrevista “por separado” en el mismo día y probablemente lugar, donde se instala entre los lectores de ambos medios al alfonsinismo y queda clara la voluntad de buscar aliados en el PJ Federal. Desde ya, queda también expuesto el rol de Clarín y La Nación como un actor más de la oposición, en búsqueda de herramientas políticas, económicas, judiciales, entre otras, que puedan servir a su objetivo de lograr una hasta el momento poco probable derrota del oficialismo en octubre. Y la oposición, con escasa intención de voto y fragmentada, recurre al monopolio como instrumento de amplificación y como un intento de instalarse en la opinión pública y no perder “visibilidad”.
En ambos casos también enfatizan que el radical “descarta” una eventual alianza con Macri. La Nación, en particular, trata de instalar a Alfonsín como “el candidato de la gobernabilidad”.
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