“En todos los talleres los alumnos se demuestran activos dado que desde que comienzan los cursos les decimos que son periodistas y salen ellos mismo a investigar”, comentó a Télam Adriana Frávega, directora del Centro “La Comunicación y los Adultos Mayores”.
“Cada uno de los talleres que se brinda propone concretar un producto final, sea una publicación periodística en los formatos correspondientes, relatos y ficciones literarias, un video minuto, slogans publicitarios, etc.”, agregó.
El año pasado, por ejemplo, en el taller Radio Abierta se realizaron tres magazines con contenido social; en el Radioteatro guionaron la historia de Jorge, un hombre de 60 años que quería vivir la vida después de la muerte de su esposa.
Por su parte, en el taller de Audiovisual crearon y produjeron un programa piloto llamado “Mañanas exclusivas”, un magazine que abarcaba lo social, cultural y político de la ciudad de La Plata.
También nacieron aquí varios diarios como “Raíz del Pueblo” en Berisso, “El Rincón de Orate”, "Letra Capital”, entre otros, y se editaron los libros “Jóvenes Recuerdos de Vida”, en 2007, y “Corazón de Barrio”, unos años después.
"Los talleres no sólo son interesantes por la posibilidad de hacer periodismo en distintos soportes, sino también porque a uno se le abre la cabeza y aprende a leer y ver los medios de una manera más crítica", detalló Dante Nucilli, alumno del Centro desde 2010.
Dante conoció el proyecto "por casualidad cuando acompañé a mi mujer a anotarse a unos talleres de UPAMI y vi que estaba la opción de hacer unos cursos de periodismo, algo que siempre me había gustado y nunca pude hacer por trabajar".
Desde entonces participó en los talleres de Periodismo Gráfico, Radio, Locución y este año realizará el curso de Redes Sociales.
El hombre, de 67 años y ex empleado del Poder Judicial, explicó que él había cursado materias de la carrera de Derecho en la universidad, pero que muchos de sus actuales compañeros era la primera vez que asistían a una casa de altos estudios.
"Estar en la facu para muchos es cumplir un sueño, y uno lo ve en las caras. Además es muy interesante el intercambio que se da con nuestros profes, que son jóvenes recién recibidos o que están estudiando y que son muy respetuosos con nosotros", señaló.
El actual Centro de Extensión “La Comunicación y los Adultos Mayores” tiene sus orígenes en 2003, cuando una alumna de la Facultad propuso realizar un diario con adultos mayores de diferentes organizaciones barriales, clubes y centros de jubilados de La Plata y alrededores.
“La idea nos pareció muy buena y comenzamos a trabajar bajo el slogan `Para aprender no hay límite de edad`. Como comunicadores luchamos para hacer ver al adulto mayor como un sujeto activo, a partir de su inclusión en experiencias y prácticas periodísticas y de la comunicación social en general”, sostuvo Frávega.
Al poco tiempo, unos quince alumnos coordinados por ella presentaron un proyecto en la Secretaría de Extensión Universitaria que fue aprobado y financiado por la casa de altos estudios.
“El proyecto proponía talleres de periodismo gráfico, radial y literario para recuperar las memorias locales a partir de los recuerdos y experiencias de los más viejos", explicó la docente.
Y agregó que "la idea era que ellos pudieran revalorizar sus propios conocimientos, adquirir nuevos aprendizajes, recuperar la historia vivida y transmitirlos a la comunidad mediante distintos lenguajes y soportes de la comunicación”.
Frávega describió que “los alumnos de los talleres vieron que su inserción en experiencias y prácticas periodísticas les permite sostener una actitud activa en su vida cotidiana y, al mismo tiempo, asumir un rol protagónico dentro de sus relaciones familiares y comunitarias”.
En 2009 se logró que la Facultad designara al Centro "La Comunicación y los Adultos Mayores" como un Programa de Extensión y al año siguiente fue consolidado como un espacio donde el pilar son los talleres, pero al mismo tiempo se generan materiales en distintos soportes para fines académicos e investigación.
A la vez el Centro también comenzó a coordinar acciones con la Dirección Nacional de Políticas para el Adulto Mayor (DINAPAM) del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación y con el UPAMI (Universidad para los Adultos Mayores del PAMI) a través de quienes pudieron acercarse a otras localidades del Gran Buenos Aires y ciudades más alejadas como Bahía Blanca, Lezama, Chascomús o Magdalena.
Por estos talleres pasaron más de mil ochocientos adultos que participaron de uno o más cursos y talleres ofertados, y cada año se entregan entre 200 y 250 diplomas.
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